Restaurante Les Truites // Barcelona / Junio del 2024
Por primera vez, comí en Les Truites en el 2013 en la sede original en la calle de Reus (Barcelona) y cuando Joan Antoni Miró preparaba una a una todas sus locuras cuajadas: la tortilla de cruasán me enamoró. Salí con los ojos como yemas.
Escribí un pronostico en la crónica que acabo de leer diez años después: "Si alguna vez la tortilla se pone de moda –y puede pasar, y merece pasar– recordemos que Joan Antoni Miró fue pionero. Rompió la cáscara hace tres décadas". Ha pasado. Barcelona ama el huevo.
Les Truites está ahora en una nueva dirección en la calle de Viladomat, local amplísimo y con llenazo un martes por la noche. Sin embargo, mi entusiamo tortillil ha bajado.
La básica, con cebolla caramelizada, llegó con la patata corta de cocción, así como las 'mongetes' de la de 'peu de porc' (y salada). Correcta la de pulpo a la gallega y, todavía en buena forma, la de cruasán y jamón. Tortillas de poca altura, como desinfladas.
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