Restaurante Gresca Bar // Barcelona
Gresca Bar: imprescindible. Alta cocina de bar: sobre todo, para los que se sientan en taburetes. Rafa Peña dándole caña a lo popular. Qué bien se come. El mejor bikini de la ciudad, como se dijo en su momento. Buñuelos de bacalao con pimentón ahumado, la célebre berenjena (poco sabor la crema de parmesano), las mollejas de ternera, la lengua con 'xatonada', la tostada con anguila, la caballa lacada, la tarta de cebolla (con desproporcionada 'quenelle' de crema), el pastel de chocolate a lo Bernard Pacaud. Gran bodega: trabajo de exploradores. Bebo con ganas el tinto Millepertuis 2012 de Balazu des Vaussières. Y precios elevados. Espacio pequeño para una gran cocina. Sí, un bar...