'Foodtruck', furgocina, gastromóvil, autogastro
El foodtruck ya tiene libro en castellano –hay varios en inglés– y se supone que seguirá una caravana de títulos como sucedió con el vermut, fenómeno editorial con los hielos fundidos.
La periodista Rosanna Carceller puede presumir de ser la primera, algo a tener en cuenta cuando se habla de cuatro ruedas.
Volumen completo e imprescindible para futuros cocineros ambulantes, puesto que cuenta quién es quién en la cocina motorizada y también cuáles son las leyes que taponan los tubos de escape.
En conexión con la comida callejera y las churrerías, los nuevos nómadas ofrecen también un repertorio de lo que se lleva: de cebiches a salchichas pasando por pulled pork y cafés molones.
Queda la cuestión de cómo nombrar a los artefactos. ¿Furgocina, autogastro, gastromóvil?
Y una opinión: 'Food truck', ¿sí o no?
http://lacocinadelosvalientes.blogspot.com.es/2015/04/food-truck-si-o-no.html
¡Qué libro tan interesante! Para todos aquellos interesados, cualquier furgoneta puede ser un footruck potencial si se utilizan los equipamientos adecuados.
ResponderEliminar