Los Diez Magníficos suplen a Los Vengadores





El grupo de superchefs, Los Vengadores a la catalana, con chaquetilla capa, la ropa interior por dentro y poderes como el del sofrito y la destilación, se multiplica y afina. Consolidado el clan heroico –Los Diez Magníficos– este 2012 son 11 campeadores o Los Diez + Uno.

La pregunta es: si los comparamos a Los Vengadores, ¿cuál de ellos encajaría en el papel de Hulk, la piel verde alga y el genio aguindillado? Nandu Jubany y Jordi Parra, de Grup Gsr-Produccions de Gastronomia, los chefs ejecutivos del Sopar de l’Any, son los candidatos a pintarse con el tono liquen. Lideran a la pandilla de campeones con la misión de garantizar la eficaz y sostenida distribución de las 12.000 tapas supersónicas entre los invitados.


En rigor, el guarismo continúa siendo redondo: son 10. Tras la crionización de El Bulli –será descongelado en el 2014 como El Bulli Foundation– Ferran Adrià ocupa la presidencia de honor y facilita el ingreso en el club a Albert Adrià.


Los Adrià Brothers son más nerviosos e hiperactivos que el ratón Speedy González privado de queso. Precisamente un establecimiento mexicano en Ciutat Vella es el siguiente proyecto de los creadores de Tickets, aunque es díficil saber qué bulle en el géiser mental: Ferran soltó en abril en Londres que la capital británica sería un buen lugar para expandirse. Podría ser. O no.


Los poderes de los superchefs: suman una veintena de estrellas Michelin –que en caso de apuro pueden ser lanzadas como estrellas ninja–, apalancan los primeros puestos en la lista de los mejores restaurantes del mundo, así como las plazas nobles de todas las guías locales.


Joan Roca puede crear el vacío y lanzar perfumecocción, Carme Ruscalleda sintoniza con lo sintoísta y el judo gastronómico, Fina Puigdevall hace brotar el magma, Carles Gaig entiende a los pichones antes de meterlos en el arroz, Paco Pérez controla los vientos del Cap de Creus, Carles Tejedor tiene ojo de tirador y muslo de liebre, Mey Hofmann convoca a los ejércitos dulces y Christian Escribà lanza tartas voladoras a cañonazos. No es de extrañar que los probrecitos Vengadores haya pedido auxilio a Los Diez Magníficos, en especial, el Hombre de Hierro, incapaz de abrir la lata.

¿Qué encontrarán los convidados en el vestíbulo del Teatre Nacional? Ah, las perspectivas y el deseo. Todos saben que el Sopar de l’Any es Festa Major. No hay en Barcelona otro escaparate del comer y el beber de ese lustre y categoría, y bajo la protección de Los Diez Magníficos.
Si el Capitán América alza un escudo, estos otros, ¡10! productos de alta potencia gustativa: el atún rojo del Mediterráneo de Balfegó, el jamón ibérico de bellota 5J, los quesos de Tros de Sort, las conservas de La Brújula, el Parmigiano Reggiano (DOP), los ahumados de Carpier, el fuagrás de Rougié, los embutidos de Salgot, las anchoas de El Xillu de L’Escala y el pan con tomate de Triticum. Ay, el desamparado Thor con un martillito para nueces.

Coordina Gsr, nuestra Shield, la agencia de inteligencia que supervisa a Los Vengadores; sirven los jóvenes talentos de CETT, colabora el cátering Singularis, Guzmán Gastronomía abre la alacena, Ficfrei facilita la logística y Klimer, la vajilla desechable. Una gran alianza.

Los Vengadores son bienvenidos, excepto Hulk. Al menos, que se ponga una camisa.



 

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